Librando a ciertos lectores de una tutoría que sabemos les resulta molesta, tratamos con estas glosas de sentar ciertos principios que entendemos son comunes a toda posición tradicionalista y contrarrevolucionaria – que en su buena fuente son necesariamente antidemocráticos y de allí mi fundamental coincidencia con Don Antonio Caponnetto – y que entendemos son: 1.- la primacia axiológica de lo religioso sobre lo político. 2.- La constitución de cualquier faena política sobre la familia como prioridad esencial y la Iglesia como componente de esta unidad esencial por medio de su representante necesario que es el Sacerdote que guía al grupo, conformando un núcleo que tiene en sí mismo no sólo la fuerza modélica de lo social, sino primordialmente la fuerza sacramental del Matrimonio y el Orden Sagrado, fuerzas originarias exclusivas de la conformación social de la Cristiandad por expansión testimonial y martiriológica .- 3.- El rechazo de toda institución de cuna revolucionaria que toma al hombre individual impidiendo el ingreso del componente familiar, hereditario, tradicional y religioso en su valoración. 4.- El Rechazo expreso de toda forma de selección electoralista basada en el número y en la igualdad. 5.- La clara desconfianza frente a todos las alianzas políticas con regímenes asentados en el laicismo, con principios que parten de una primacía de “lo político”, ( entendiendo por ello una actividad dirigida a la toma del poder, en todo o en parte, que deja de lado o simplemente “pospone” el imprescindible componente de un fin religioso, en la creencia que lo religioso es un paso posterior a lo político y no al contrario), basados principalmente en movimientos de masas, promovidos por minorías de origen plebeyo sin continuidad de tradición y sometidos a la regla del resentimiento que su origen les impone. 6.- En suma, no dando por muertos los valores que construyeron la cristiandad y encarnarlos a toda costa como única tabla de salvación de los social, aún bajo la sospecha y la burla del anacronismo y en la confianza que el “tiempo” es sólo el tiempo donde ganamos la salvación del alma en cristo Nuestro Señor. Y 7.- Por último, tener la clara y absoluta conciencia que el mundo político y social que nos rodea no es indiferente frente a lo religioso, que esto es sólo una fachada que oculta su intención radicalmente satánica, preparadora y precursora de la fuerza que nos lleva a la catástrofe profetizada y frente a la cual, se nos pide desde lo alto una toma de posición “hic et nunc”, ya que todo cristiano en toda época, enfrenta al Anticristo que está hecho y derecho frente a El. Con toda sinceridad no es esto para entablar una reyerta, sino para aclarar posiciones y dar medios de juicio al lector, donde cada uno forma su criterio y toma su partido con tranquilidad. Y comenzamos por la primer glosa que resume todo y cierra toda discusión. BLANC DE SAINT-BONNET: (Gran autor contrarevolucionario profusamente leído y citado por Mons Lefebvre) “La revolución es religiosa, el mal es religioso, el remedio es religioso. Nosotros no saldremos más que religiosamente.” LOUIS DE BONALD (Padre intelectual del pensamiento contrarevolucionario) “Depositaria de todas las voluntades de Dios y de todas las reglas necesarias al hombre, la sociedad es un ensamble de familias y no de individuos. Y de cada una de estas familias uno puede decir que es un cuerpo, y aún más que eso, porque ella es una sociedad, y aún más sociedad que el estado mismo, ya que ella es por su constitución nativa, el germen, el tipo, y así mismo la razón, ya que el estado existe después de la familia, por la familia, para la familia y está constituído como la familia; es decir, sumiso como ella a la constitución ternaria del poder (padre, madre, hijos, en la sociedad doméstica; jefes, funcionarios y pueblo en la sociedad política)”. “…la idea gubernamental es nacida en las costumbres de la familia y de la experiencia doméstica, ya que los primeros hombres han concebido el orden social bajo la forma patriarcal y jerárquica. La familia es el embrión del estado.” “En la familia no existe más que un solo ser moral, un solo espíritu, una sola alma, yo diría con la Biblia, una sola carne. La familia es el tipo de la monarquía, pero fundamentalmente es la base del patriciado; en ella reside y se conserva la idea de autoridad y de soberanía, que se trasladará al estado. Es sobre el modelo de la familia que todas las sociedades domésticas y feudales se han organizado, y es precisamente contra esta vieja constitución patriarcal que protesta y se revela la democracia moderna” RUBEN CALDERÓN BOUCHET: (Reconocido autor contrarevolucionario, expresamente legatario de los anteriores contrarevolucionarios católicos. Erróneamente considerado maurrasiano sin tener en cuenta las consideraciones que aquí se expresan y ferviente admirador del francés en la resolución del problema de su tiempo, pero no admite el equívoco común de la primacía de lo político) (el enemigo) “Los gobiernos republicanos en general son anónimos y tratan siempre de que en primera plana no figuren los príncipes que mueven las marionetas. Colocan testaferros que han hecho méritos en las barricadas o en los comités e inspiran confianza en las muchedumbres” La política del ralliement sostenida por León XIII a partir de 1878, pero oficialmente instalada después de 1892 concluyó con un fracaso rotundo: su principio de que todas las formas de gobierno son buenas en tanto concurran a la realización del bien común, es válida en abstracto, pero resulta de una candidez estremecedora cuando se aplica a situaciones reales sin tomar en consideración las fuerzas que alientan ese régimen y los criterios que sostienen con respecto a lo que es el bien común”. “Da pena … ver los esfuerzos hechos por los católicos para hacerse servir por los Derechos del Hombre o el sistema de las libertades democráticas, inventadas precisamente para reventarlos.” (politique d'abord) “Maurras distinguía en la religión cristiana una fuente de inspiración judía y un orden de organización típicamente romano. En la primera veía los principios de una mentalidad anárquica que tendía, inevitablemente, a una depreciación de los valores fuertes en beneficio de una disposición caediza e igualitaria de la sociedad…” “… Lo curioso de esta interpretación es que la acusación de anomia que Maurras advertía en la cuenca judaica del cristianismo, es la misma que los judíos oficiales hacían al cristianismo en general, como si la revelación consumada en Cristo fuera la verdadera causa de esa actitud contraria a la Ley. En realidad se trata de una tentación inspirada por la libertad que Cristo prometió en su Reino de los Cielos a los que vivieran conforme a la verdad.” “Maurras no era un tomista en sentido estricto…sus escritos prueban, más bien, un cierto eclecticismo con rumbo preferentemente aristotélico.” “Como lo hemos dicho en varias oportunidades a lo largo de estas reflexiones sobre el pensamiento de Maurras, a éste la faltó la fe teologal para dar un auténtico remate metafísico a su concepción de la política.” Citando a Jules Le Maitre, dice: “Los beneficios de un Consul es cosa accidental y frágil. Nunca estamos seguros de encontrar al buen Dictador y bien se puede caer sobre el malo. La Dictadura es la salvación por un solo individuo. Lo que se debe desear es la conservación del país por una continuidad, por una estirpe de gerentes, adheridos al mismo principio y a la misma tarea” “Distinguir la política de la religión en un plano de intereses puramente teórico no es faena difícil, y muchos lo hacen con la íntima convicción de que tales distinciones pueden aportar claridad al campo de las actividades donde se debaten, profundamente mezcladas, las cuestiones políticas con las cuestiones religiosas. Cuando existía la cristiandad y todo el orden social formado a la sombra protectora del magisterio eclesiástico era una sola cosa, el problema de la distinción se presentaba en una luz bastante clara. Al político le correspondía ordenar la convivencia temporal de los hombres y la Iglesia disponer las almas para la salvación eterna. Nada más simple y sin embargo ambas tareas marchan juntas, porque el orden político es un orden moral y las mismas virtudes que cierran las puertas al enemigo de la ciudad, las cierran también al enemigo del alma.” “ Si insistimos en que Roma es esencialmente un magisterio y no un lugar, es porque Roma como lugar puede convertirse en la sede de un falso magisterio que enseñaría todo lo contrario de aquello que enseñó la tradición romana.” “ En este sentido muy preciso la política es siempre un acto de restauración, como la actividad del médico, porque los seres humanos, solos o asociados, necesitan permanentemente el sostén de la autoridad para rehacer el rumbo de una vida naturalmente caduca y amenazada, en su sana orientación por la triple presencia del error, el pecado y la miseria.” “No, indudablemente la sola dictadura no era bastante. Carecía de continuidad y uno de los peores males atribuibles al sufragio y a los golpes de estado es que cada gobierno deshace lo que el otro hizo, convirtiendo la administración de la sociedad civil en una sucesión de actos convulsivos en donde desaparece la obra de los siglos.” “La influencia del dinero sobre la conducción política de la sociedad ha traído como consecuencia inevitable la instalación en el poder de una comandita de testaferros, cuya habilidad en el manejo de la opinión pública y, a veces, mucho menos que eso, su simple histrionismo los ha convertido en promotores del sufragio. Esta minoría dirigente ejerce sobre la sociedad una suerte de fascinación degenerativa, porque incita a una emulación en el arte de embaucar y seducir a las masas que conducen a los más ambiciosos a buscar una cierta superioridad en este terreno, en lugar de hacerlo según las pautas de un verdadero ascenso en el nivel de la perfección humana.” “Conviene recordar que para el tiempo de Maurras el periodismo era todavía una actividad adscripta a un nombre y un apellido. El publicista tenía una cierta personalidad y su obra, buena o mala, reflejaba en alguna medida sino su pensamiento, por lo menos su estilo peculiar. El propio Maurras es un claro efecto de la influencia publicitaria y aunque existían otros de menor cuantía y con una proyección en el público decididamente mercenaria, el dinero tenía la necesidad de comprar personas. Hoy esa deficiencia, ese ultraje al poder financiero y la lógica estricta del sistema democrático ha desaparecido gracias al anonimato periodístico. La opinión se elabora en oficinas de carácter subrepticio y el poder de las finanzas se acentúa hasta hacer desaparecer todo rastro de una concreta personalidad responsable.” “Es indudable que los hechos históricos no suceden con la diáfana claridad de las inferencias lógicas. El dinero, aunque se escriba con mayúscula, es siempre un instrumento en manos de los hombres y, como es natural, estos obran movidos por la voluntad, los sentimientos, las emociones o las pasiones, impulsos que pueden cambiar en el curso de los tiempos y con mucha más celeridad de lo que uno cree. No obstante cuando se monta una empresa, de cualquier índole que sea, esta suele imponer a su autor las exigencias de su propio crecimiento y muchas veces más que dirigidas por ellos, parece dirigirlos y los que es más grave, hasta su destrucción.” “Mantener en la conducción de la Iglesia una armonía que contemple la defensa de la doctrina revelada por Dios y los muchos intereses relacionados con las exigencias temporales de una sociedad que vive y se proyecta sobre la tierra, ha sido para los Papas mucho más difícil de lo que podemos creer. No fue fácil en una época en que existía la cristiandad… lo fue menos a partir de la ruptura del sistema religioso y cuando la política revolucionaria comenzó a reclamar para el estado un poder que pretendía reemplazar la potestad de la Iglesia de Cristo. A partir de ese momento la Iglesia tiene que atender dos aspectos en su relación con los dominios temporales: la invasión de la política en el terreno propio de la religión y evitar la tentación de hacer concesiones religiosas en los compromisos eventuales…El llamado raliement fue un error grave en la política de León XIII, porque debilitó a los católicos… en su lucha contra la masonería revolucionaria y permitió el establecimiento de la Democracia Cristiana, la fuente de confusión más prolífica de nuestro tiempo.” “ El hombre nace en el seno de una familia y la función esencial del estado es completar, subsidiariamente, a estas comunidades intermedias que son anteriores a él… el estado moderno ha crecido a expensas de ellas y las ha reducido a poco menos que nada.” “Pero el respaldo familiar no solamente aumenta las energías del individuo que se destaca, también las limita y pone obstáculos a un proyección desmesurada.” “Las concesiones al espíritu del tiempo han sido siempre fatales para la doctrina de la Iglesia.” (los principios restauradores) ”Señalar los males que aquejan a una sociedad histórica determinada es un acto que convalida la voluntad política de restaurar la salud comprometida con una fuerte convocación a las energías aún existentes y en condiciones de hacer remontar las causas de la decadencia…Hay que contar, inevitablemente, con las fuerzas sanas que posee ese pueblo. ..En ningún momento se le ocurrió a Maurras que la receta monárquica tuviera valor de remedio universal…No, el Rey no se improvisa, o se lo tiene por una imposición inevitable del destino histórico o simplemente no hay Rey. En este segundo caso hay que buscar la continuidad del orden político en alguna otra magistratura o institución substraída por su propia naturaleza a las maniobras electorales.” “…los países sin tradición monárquica no la pueden crear de la nada y tendrán que aplicar otro remedio si quieren sustraer el ejecutivo a la influencia de las facciones…” “Ante todo conviene destacar que las auténticas minorías no se pueden formar en los albañales de una suburra. Su ambiente natural es el hogar, y no cualquier hogar, sino aquel donde reina un orden y una disciplina apta para influir en la formación de esos buenos hábitos que nuestra tradición llamó virtudes. El hombre que a fuerza de talento y de voluntad ha superado todas las dificultades de un mal nacimiento y de una crianza todavía peor, existe, pero es la excepción y con excepciones no se pueden formar buenos planteles, porque suponen, precisamente, el ejemplar único. No olvidemos tampoco que el resentimiento es una situación espiritual que acompaña frecuentemente a una lucha denodada por destacarse en un medio de oposición y dureza. La pérdida del sentimiento familiar, de la hidalguía, es un índice de bastardía que la pluma sofisticada de Jean Paul Sartre ha convertido en un elogio. Hoy se confía demasiado en el papel selectivo de las instituciones públicas tales como la escuela, la universidad, los gremios o los partidos. El propio ejército es visto en la actualidad como si nada debiera al aporte de las familias y por sí solo pudiera dar a los individuos las cualidades que constituyen a un auténtico representante de nuestra tradición militar y caballeresca, esa elegancia gratuita de la vida que según Burke ponía al hombre el sello de una distinción imponderable. Un buen profesional de la guerra puede ser, en el mejor de los casos, un excelente comandante, pero nunca será un caballero y los cuadros de un ejército nacional tienen, necesariamente, que representar a las mejores familias de un pueblo si no quieren que el ejército pase a ser un instrumento de cualquier aventura política.” “Este régimen, enemigo de la herencia en su sentido cabal, parece pensado por una gavilla de bribones que han tomado por asalto una propiedad y cuyo lema pudiera resumirse así: no dejes para mañana lo que puedas consumir hoy.” Citando a Maurras decía “porque el gran mal, no viene ni del comunismo ni del socialismo, ni del estatismo pretendidamente radical, sino de la democracia.” “El proceso revolucionario en la medida en que avanza sobre un cuerpo político, crea una serie de situaciones aparentemente irreversibles, que los hombres, sedicentes realistas, se apresuran a considerar como si fueran aspectos normales de la política: no hay una dinastía legítima, no hay aristocracia, no hay nobleza, no existe más el magisterio de la Iglesia a no ser como nostalgia o como simple curiosidad histórica. La familia tiende a desaparecer y con ella la vocación maternal y, por supuesto, no se puede contar con una legítima transmisión de la propiedad a sus descendientes. Si todas estas ausencias, mal o bien reemplazadas por las prótesis revolucionarias, no tienen porqué ser tomadas en cuenta en la conducción de un movimiento político que pretende ingresar al sistema de partidos y competir en la toma del poder, entonces ser contra revolucionario es como alimentar una utopía al revés. El juego político obliga a plantear las posiciones de partido de acuerdo con argumentaciones impuestas por la revolución. De esta manera el proceso destructivo se convierte en el hecho irreversible por antonomasia: la muerte a plazo seguro del orden social.” -------------------------------------------------------------------------------------------------------- R.P. ROGER THOMAS CALMEL (Sacerdote dominico contemporáneo . Intelectual de fuste, tradicionalista, gran opositor de las reformas conciliares, teólogo egregio, liturgista, pensador político de enorme profundidad. Propuesto por Mons Lefebvre para la primera dirección del Seminario de Êcone. Cofundador y colaborador de la resistencia católica en la revista Itineraires. Fallecido en olor de santidad y venerado como tal por el tradicionalismo francés . Poco conocido en nuestro medio y sin traducción al castellano). Dijo de él Mons Lefebvre: “Esto que realiza el autor en su libro sobre la Teología de la Historia, debería estar en las manos de todos los profesores y alumnos de los últimos años. Más aún, todas las personas deseosas de conocer “La verdadera Historia” encontrarán en estas páginas una profunda edificación y una gran satisfacción.” (necesidad de los “medios puros”) “Si el deber de la resistencia es evidente, aquel de los medios de acción lo es aún más. La tentación es fuerte, en tiempos de cataclismo, de locura, de pérdida de la paciencia, de esperar una solución inmediata a los males que nos afligen. Uno toma las armas que uno cree eficaces, termina imitando a sus enemigos y agravando el mal.” “Cristo dice bien “dad al Cesar lo que es del cesar” pero el Apocalipsis agrega en substancia “Maldición a la Roma de César”, porque la humanidad se encuentra de hecho en una situación de caída y de redención y no en un estado “químicamente puro”. El mal debe ser denunciado, ya sea el pecado personal, ya sea el de las instituciones políticas y los organismos de la subversión en el seno mismo de la Iglesia. Predicar el Evangelio tomando partido por no condenar al mundo, es predicar el Evangelio tomando partido por una humanidad que no existe.” “Satán trabaja con gran celo para organizar este mundo en el sentido de la Pax Americana; la domesticación total de la humanidad por el estado es el mejor medio que ha encontrado para realizar su proyecto.” “Hay omisiones curiosas; Pablo VI cita sus antecesores y hasta encuentra grato hablar una o dos veces de Satán; pero el conjunto de sus escritos hablan del mundo moderno como si el mundo no estuviera todo penetrado por los principios diabólicos, los principios anticristianos. No fue de esta manera que San Pablo abordó el mundo pagano. Siendo que nuestro mundo se opone a Cristo y es peor que el mundo pagano.” “La gran apostasía se extenderá por el mundo, no solamente por las maniobras de algunos servidores de Satán, perfectamente lúcidos y conscientes del rol que asumen, sino por la docilidad cómplice de los cristianos y los curas ilusionados.” “La indispensable oración habitual nos obtiene el don de que seamos testigos de Cristo en un mundo de tinieblas y de perdición y que estemos unidos a Cristo para contribuir a la salvación de las almas y, quizás, a una pequeña restauración de algunos islotes de civilización cristiana antes del fin de los tiempos.” “ Yo estoy plenamente convencido que lo importante es formar, en la medida que se pueda, pequeñas comunidades cristianas fervientes.” “ Este contacto directo con la mediocridad de la fe y de las costumbres, refuerza mi convicción de predicador de que la solución no consiste en “compromisos” y en voces mediáticas, sino en la constitución de islotes o de bastiones de vida cristiana autentica.” “Yo le diría a aquellos que están desorientados, impacientes y malhumorados: la oración, la perseverancia, la obstinación en rezar… nos permiten estar en una lucha contra un mundo que parece cristiano y donde nosotros hacemos las veces de idiotas.” “ A las familias les ruego un “anticonformismo tranquilo” frente al envilecimiento general.” “ a los propios ambiciosos, que aprovechan la crisis para hacer carrera, se placen en la propia cirrosis; los “resistentes” que levantan tan alto la cabeza que tienen cogotes de jirafas; “hombres de bien” con cogotes de jirafas y que gritan como rinocerontes despellejados.” “Mgr Lefebvre, de los padres espiritanos, me ha mandado una bella carta. El al menos, pertenece a la especie poco numerosa de los resistentes de la Fe que no andan levantando el cogote.” “El Anticristo… para llegar a sus fines, llamará en socorro al poder político y la vida social, de tal suerte que la irreligión será parte necesaria de la vida, hará cuerpo con la vida.” “Pero hablando prácticamente, que es lo que tenemos que soportar? Enterrados que estamos en las redes innumerables del estatismo, moviéndonos en un medio saturado de laicismo y neomodernismo, en un clima de veleidad y de lujuria, como aplicar el programa pontifical? (doctrina de la Iglesia) Y bien! Ir hasta el fin de nuestras posibilidades en los dominios exiguos que quedan en nuestro poder; cerrarnos y colaborar en pequeñas comunidades naturales; comunidades lo más netamente católicas que sea posible, que acepten el retiro del mundo como ley esencial de existencia y de apostolado.” “Tu te revuelves contra el misterio del mal, su organización, que no te atreves (todavía) a creer como tal… Uno sabe que el príncipe de este mundo YA HA VENCIDO …” “La revolución es un “bloque”, y es como a un bloque que uno debe combatirla… los “buenos jefes” que aún pretenden conservar algunas cosas de la vieja fe de siempre, quieren llevar la oveja junto al lobo, apoyar todo acto público conforme a la tradición, pero contener el modernismo en ciertas fronteras. Esto es absurdo, no se combate la revolución por partes”. “No se pretende hacer una iglesia paralela, pero hay que formar pequeñas comunidades que se preparen para el futuro cualquiera sea este. Frente al caso de un fin del mundo inminente o aún frente a la posibilidad de una restauración de la cristiandad tomamos el mismo partido.” “ La necesidad de fortines de resistencia se muestra más urgente que nunca.” “Jesus está en agonía dentro de su Iglesia, esto podemos asegurarlo en la hora presente.” “Hay una locura en ciertos tradicionalistas de que hay que tomar del Concilio aquello que tiene de bueno, por el Concilio, pero en contra de sus desviaciones y de sus excesos subalternos… estos… son nuestros peores enemigos, porque tienen un “color” de tradición, pero nunca irán hasta el hueso.” “por todo esto, no hay que hacerse ilusiones sobre nuestro tiempo. Ver los peligros que hay para nosotros en nuestro tiempo: el activismo. Es una actividad humana que cree poder reemplazar la gracia. Tomemos el tiempo necesario en tranquila oración. “ “Las innovaciones conciliares son un sistema estratégico de ocupación, lo que conviene es fundar y sostener modestamente los fortines de la Fe. .. aquello que nos queda es… sin relámpagos ni ruidos levantar fortines de resistencia, de enrolamiento piadoso y vivo a la tradición. Estos fortines parecerán inútiles frente a una Iglesia aparente y ocupada, siempre parecerán defensas débiles. Que nos importa. La gracia de Dios no se mide por lo que parece. Lo que está en nuestro poder es dejar modestas obras de resistencia y conservarlas. Hablo de conservarlas desde lo interior, de la conservación que viene de la oración, del estudio sagrado humildemente conducido, de la caridad fraternal, de la modestia, Uno podría recomendar a todos las palabras enviadas por San Pablo a las pequeñas comunidades nacientes, aquellos fortines de Salónica o de Efeso.”. ----------------------------------------------------------------------- ¿HAY QUIENES PIENSAN DIFERENTE DENTRO DE CIERTO TRADICIONALISMO A ESTO QUE MOSTRAMOS? Si, en efecto los hay, Calmel no ha sido parco en proveerlos de críticas, como hemos visto. Y estas se han sentido especialmente en Francia donde es conocido. Por ejemplo veamos a Bernard Dummont y el equipo que escribe el libro “IGLESIA Y POLÍTICA Cambiar de paradigma” (Ed Itinerarios) en donde se concluye: “Por último conviene rehabilitar la política. Una de las consecuencias del llamado “final de la política” es la respuesta “comunitarista”, que concluye lógicamente en la aceptación de la privatización de la religión … En este caso el colmo del comunitarismo se alcanza cuando al refugiarse en la “sociedad civil” y la pérdida del sentimiento de pertenencia nacional vuelven a los hechos a un encierro en formas de sociabilidad religiosa (reuniones. Peregrinaciones, grupos de oración), sin dudas buenas en sí mismas, pero muy alejadas de la implicación de los laicos en la primacía que hay que conceder al bien común, comenzando por el servicio de su patria y de las cristiandades amenzadas de extinción.” (en esto veo algo de Caponnetto con lo que no acuerdo). Luego propone sus soluciones, que en suma, y reconociendo que no se puede establecer un programa político, terminan en un renacimiento del pensamiento tradicional en las universidades donde ellos – los escritores del libro- fungen como profesores. La serpiente encontró su propia cola. Uróboros como todos los universitarios. No se nos oculta que para estos autores, como para mucho de los que leen este medio, el pronóstico parte de que no estamos tan mal como dice Calmel. El Diablo no es tan malo como lo pintan y no gobierna tanto como dicen. Otros agregan que el Concilio es salvable con una depuración, esto lo dice tímidamente Dummont, a toda voz Castellano, confusamente Ayuso; es decir, uno es francés, otro italiano y el último español. Sobre estos prevenía Calmel, jirafas cogotudas que no llegarán al hueso y que “son nuestros peores enemigos”. Que Dummont conoce a Calmel, no me caben dudas, y que el comunitarismo se refiere al consejo del dominico, tampoco me caben dudas. Que el palo es para el rancho de las comunidades formadas por la acción religioso-política de Mgr. Lefevbre, menos. Que ellos quieren abrir las puertas de esos fortines para que salgamos a escuchar y difundir su prédica, y otros sólo queremos abrirlas para que entren otros a salvarse (a riesgo de que sean quintacolumnistas), y mantenerse “lo más católicos posibles”, menos aún. Debo conceder que uno enfrenta los autores desde la perspectiva que marca su formación y muchas veces sólo ve lo que quiere ver. Va para mi y para otros, y como ejemplo pongo una conclusión sobre Rubén Calderón Bouchet que queda al arbitrio de los lectores y que viene del puño de Fernando Segovia, a saber: Hablando del autor dice “ Se trata, en la restauración del recto orden social, de reconocer el mandato de Maurras: politique d’abord , ganar en el terreno político a la elite (política, mediática, económica) que hoy copta el estado en provecho propio…” “Como sabían los escolásticos, el fin es lo primero en la intención y lo último en la ejecución. Si la política ha de servir a la vida humana, la contrarevolución deberá empezar por el gobierno de los resortes estatales para que ellos acaben sirviendo a la vida trascendente, que pasa por la fe y la Iglesia.” Es probable que yo entendí mal, ya que entendí justamente que ese mandato de Maurras sólo tiene un valor histórico para un momento y dentro de un contexto, como tener una dinastía católica en vida, etc. pero carece de valor axiológico universal y mucho menos ontológico. Entendí que ganarse la elite política, mediática y económica no se le ocurrió ni en sus más afiebradas locuras, ya que sólo a esa mierda cabe “comprarlas” y su sueldo era exiguo, siendo por demás que entendí de lo citado, que eran meros testaferros de poderes ocultos y anónimos, es decir que compramos una estafa. Entendí que pretender coptar los resortes de gobierno, firmemente establecidos en la premisa revolucionaria, era justamente esa utopía al revés que suelen tener ciertos contrarevolucionarios y que denuncia como el mal de los males para la restauración. Entendí por último que primero hay que buscar el Reino de Dios y todo lo demás vendrá por añadidura, y para colmo entendí que la política no era el reino de Dios, sino justamente una añadidura. Pero es posible que yo haya entendido mal y que como dicen, y Calmel avisa, sólo estoy haciendo el idiota con una monserga frailuna. Pero eso es lo poco que entiendo y pido perdón por los agregados. Deben los lectores atenerse a las citas que son jugosas y sacar sus propias consecuencias. Para los que se aburren con más de dos líneas, ruego lean el diario Clarín. DARDO CALDERÓN.