No se ha hecho esperar la primera provisión legislativa del nuevo obispo de Roma (en la foto). El nombre de su motu proprio, según trasciende en espera de la inminente publicación, será Summorum Episcoporum. Dará la noticia El Nuevo Osservatore Romano, diario de la Iglesia de Roma, que en su nuevo formato ha sustituido al polvoroso Osservatore Romano de antaño: no más escudo con tiara y llavecitas, no más Santa Sede ni, sobre todo, latines, aún en los lemas que se leían bajo el encabezado. El vetusto Non prævalebunt ha sido sustituido por el mucho más significativo No pasarán, y el otro lema (Unicuique suum) con la frase La propiedad es un robo.
El Summorum Episcoporum se ocupa de algunos urgentes menesteres espirituales y necesarias precisiones litúrgicas. En adelante, por ejemplo, el via crucis será conocido con el nombre de Sendero Luminoso y el sacramento de la confesión se administrará en asamblea y será llamado Autocrítica.
Da comienzo, por otra parte, a la reforma de la Curia. La Congregación para la Doctrina de la Fe se rebautiza Tribunal popular de los Derechos del Hombre.
En cuanto al motu proprio Summorum Pontificum, emanado en su tiempo del obispo emérito de Roma: será confirmado, pero con más precisión en el ámbito de aplicación: la hasta ahora llamada Misa tridentina podrá ser celebrada exclusivamente en las islas Malvinas.
Se nos informa, finalmente, que se ha dado comienzo a los trabajos de tallado de la efigie del nuevo obispo de Roma en San Pablo extra Muros; curiosamente, se está cincelando sobre la imagen de Clemente XIV, conocido por suprimir, en el siglo XVIII, la orden de los jesuitas.
ÚLTIMA NOTICIA: Inicia finalmente un período de transparencia y probidad en el Instituto para las Obras de Religión (IOR), que tanto diera qué hablar: ha sido convocada para la presidencia del directorio encargado de supervisar la aplicación de los procedimientos antilavado una personalidad harto conocida por su cristalina probidad fiscal: el señor Diego Armando Maradona.
Fuente: MiL
