Es un oscuro y desconocido oficial del antiguo ejército soviético que en un momento crítico para el mundo ejerció una prudencia verdaderamente inusitada. Todos los detalles se pueden leer aquí (en inglés).
Haciendo un rápido resumen nos ponemos en Septiembre del año 1983. La tensión entre las dos superpotencias alcanza un grado máximo. Los soviéticos han derribado dentro de su espacio aéreo un avión de pasajeros surcoreanos, matando a los 269 pasajeros incluido un congresista norteamericano.
En la noche del 26 de Septiembre de 1983 el teniente coronel Petrov de las Fuerzas de Misiles Estratégicos, substituye en su puesto del bunker Serpukhov-15 cerca de Moscú a un compañero que no pudo incorporarse al servicio. Durante su turno Petrov recibe hasta 5 informes de satélites soviéticos indicando el lanzamiento de misiles nucleares estadounidenses hacia Moscú.
El protocolo es, resumidamente, disparar y luego preguntar. Es decir que tiene la orden, ante dicha noticia, de lanzar todo el potencial nuclear soviético contra Estados Unidos y luego informar a los líderes políticos y militares de la URSS.
Petrov decide que es un error del ordenador y rompe el protocolo militar. Según se supo después, un extraño alineamiento solar fue responsable de que los satélites emitieran falsos positivos.
A Petrov lo jubilaron anticipadamente y solo años después recibió reconocimiento por su valiente posición que sin duda salvó al mundo.
Via: Pertinatious Papist.
Del Blog El Embajador en el Infierno